Después de una o dos horas, cuenta Tew, escribiendo cosas inconexas en el papel, se le iluminó la mente: como si su subconsciente hubiese estado construyendo el plan por él, en pocos minutos tenía la estrategia completa. Una estrategia que le hizo ganar más de un millón de dólares en apenas seis meses. Tew decidió vender un millón de píxeles, a un dólar cada uno. Tan sencillo como eso, en eso consistía el negocio. Abrió una página web en la que puso a la venta una cuadrícula de 1000x1000 píxeles y comenzó a venderlos. A cambio del pago, el comprador ponía en su espacio la imagen que eligiese enlazada a cualquier web.